JESÚS SACRAMENTADO, TANTAS VECES AMADO Y TAN PRONTO OLVIDADO.
Esta es una la frases quizás más repetida en la predicación de este domingo del Corpus, donde hemos vivido un verdadero oasis en este jardín contestano. El sábado a las 17’30 lo niños de junior recibían la pañoleta, acompañados por sus educadores y padres. Durante todo el curso hemos celebrado la Eucaristía, unas veces en el altar mayor otras en la capilla de la comunión, la participación ha sido verdaderamente significativa pero quizás lo más significativo ha sido la constancia, todos los sábados a excepción del mes de mayo ha habido celebración de la eucaristía con el movimiento junior. Para la comunidad parroquial el celebrar la fe en el domingo no debe ser algo puntual, o que esté dentro de un proyecto de curso que va orientado a un final de curso y vuelta a empezar como si se tratara del mito de eterno retorno, sino que nos ha llevar adelante en un proceso de inserción en Jesucristo, el cuál se ha descubierto como el amigo que nunca falla, el que verdaderamente nos ama, y que ese amor debe ser correspondido no desde el temor sino desde la gratuidad.
En la homilía les he explicado o simplemente he versado lo que significa la pañoleta. Un signo que evoca una realidad mayor, y que es consecuencia de un compromiso de vida que ha de ir tomando forma y vida en nuestro propio actuar de cada día.
Por la tarde a las 20’00 h. hemos tenido la celebración del primer sábado de mes dedicado a Nuestra Señora del Carmen, han asistido la mayoría de la junta de la cofradía con sus presidentes, moniciones, lecturas, Quino ha cantado espléndidamente el salmo “Tu eres sacerdote eterno según el rito de Melquisedec”. Ya en la homilía aprovechando la reproducción de El Salvador de Nicolás Borrás he hecho una breve alusión al hecho que siendo Mossèn Joan Sanz rector de la parroquia de El salvador encargó al Contestano Nicolás Borrás, de la escuela de Juanes, una imagen pictórica para la catequesis de los neo conversos. Que importante es en la catequización, en la explicación de la belleza de la fe, la CONTEMPLACIÓN. “Contempladlo y quedaréis radientes”. La Iglesia, en su proceso de evangelización es madre y maestra, madre en cuanto que da a luz aquello que lleva en las entrañas. El amor de los amores, Cristo presente en la eucaristía. Fuente de unión y comunión con la Trinidad.
A las 21’15, hemos empezado la celebración de la eucaristía con las comunidades neo catecumenales, en la homilía he glosado estos textos sagrados.
«Melquisedec, rey de Salem, ofreció pan y vino. Era sacerdote del Dios Altísimo y bendijo a Abraham». Salem se identifica con Jerusalén. Melquisedec como sacerdote-rey es una prefiguración de Jesús. Con la presentación del pan y del vino marca lo que más adelante será el sacerdocio instituido por Cristo, que sustituirá al sacerdocio del AT.
«Yo he recibido una tradición que procede del Señor». Es el primer relato de la institución de la Eucaristía, después de los evangelios. La Eucaristía será el recuerdo más entrañable, más valorado por los creyentes cristianos. Es el memorial que Jesús invitó a sus discípulos, muy encarecidamente a guardar, y a celebrar. De hecho, dentro de este memorial está todo el misterio de Cristo: vida, muerte y resurrección.
«Cada vez que coméis este pan y bebéis de la copa proclamáis la muerte del Señor hasta que vuelva». Celebrar la Eucaristía, es decir comer el pan y beber el vino es proclamar la muerte del Señor, pero simultáneamente es adentrarse del misterio del Resucitado. Al proclamar la Muerte de Cristo nos incorporamos a Él, para empezar a vivir con Él la vida de resucitados.
«Él les dijo: —Dadles vosotros de comer». El relato de Lucas nos recuerda este gesto de Jesús que es anuncio del sacramento del pan y del vino, o del Cuerpo y la Sangre del Señor. De este sacramento los cristianos y los sacerdotes están llamados a ser un instrumento que haga posible que este alimento alimente a los hombres y tengan vida eterna.
«Él tomando los cinco panes y los dos peces, alzó la mirada al cielo, pronunció la bendición, los partió y se los dio a los discípulos». Recoge los gestos de Jesús, previos a dar el alimento a la multitud. Son gestos que también se recogen en el rito eucarístico
El domingo a las 9’00 hemos celebrado la misa mayor pró populo. Incienso, asperges, moniciones, organista,…como todos los domingos solemnísima. Y más o menos he hecho la misma homilía que el sábado a las 20’00.
A las 12’00 un grupo de personas mayores han recibido la unción de enfermos, en esta celebración ha asistido el Sr. Alcalde Rafael Briet y dos concejales. Al finalizar la misa se ha procedido a la bendición de la restauración de los Santos médicos, tallas del s. XVIII, y que ha restaurado Ricardo Bargues, natural y vecino de Godella. Su estado era deplorable, pues hace dos años fueron robados y se encontraron en una chopada cercana a la población. El costé ha ascendido a 2.325 euros, y la colecta de la semana pasada fue destinada a sufragar los gastos, recogiéndose 2.419 euros.
En la homilía centre la meditación en el encaminarnos hacía los santuarios sufrientes de la humanidad y sobre todo los enfermos. He exhortado a hacer una apuesta por el mundo del enfermo… No olvidemos el inicio del evangelio de hoy “Estaba Jesús predicando sobre el Reino de Dios y curando a los que lo necesitaban”. Y aproveché también las imágenes de los Santos médicos así como lo que han significado para la parroquia del Raval. Tras finalizar fueron entronizados en el lugar de costumbre.
A las 14’30 alrededor del Montcabrer y las cimas de Mariola e Aitana se han ido formando tormentas donde ha sido más “el ruido que las nueces” y ha terminado por despejarse. A las 18’00 y tras el rezo de vísperas en Santa María, se han congregado los niños de primera comunión de El Convent, El Raval y Santa María, unos 80 niños y niñas, con sus padres y las distintas cofradías presididas por la Cofradía de Santísimo Sacramento, han concelebrado el párroco de Santa María y el Padre Pascual Montaner, mientras el P. Cobo ha ido a celebrar a Novaire; han ayudado a la Santa Misa y procesión Rafael y Elías Reig y ha presidido un servidor. La verdad que ha sido una verdadera gozada, pues en este templo parroquial a rebosar, todo ello repleto de Salvia Mariolensis, los jóvenes del Junior con las guitarras, Joanet Palací tocando el órgano de tubos a toda virola, era sin duda un oasis en este jardín contestano a la sombra de Mariola. En la homilía me ha embargado la emoción. He empezado “ Contempladlo y quedaréis radiantes vuestro rostro no se avergonzará si el afligido invoca al Señor el lo escuchará”, en la homilía he explicado la importancia de la contemplación. La profundidad de que seguimos el rito antiguo de Melquisedec y no el propio de los Levitas, he ido desgranando algunos versículos de la sagrada escritura para terminar con una breve alusión a la unidad y comunión tan necesaria para la sociedad.
La procesión ha sido presidida por los PP Franciscanos, D. Vicente se ha encargado de los niños a la hora de leer en las mesas y un servidor de llevarlos y traerlos en la procesión, así como entonar algún canto…
Ante Jesús sacramentado no puedo sino expresar “sea por siempre bendito y alabado” pues soy consciente de tener un verdadero amor, pero también de experimentar la frialdad del pecado cundo de él alejo. Por ello en este año sacerdotal a punto de expirar os pido que recéis por la perseverancia de los sacerdotes
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